En defensa de los insectos, Alemania se compromete a prohibir el glifosato para 2023

El costo del glifosato se ve en diferentes partes del mundo. En Alemania, el polémico herbicida ha desencadenado una fuerte preocupación ante sus impactos sobre las poblaciones y ecosistemas de insectos. Este hecho llevó al gobierno nacional a determinar el 31 de diciembre del 2023 como la fecha límite para permitir su uso. Luego, quedará prohibido por completo.

La prohibición del glifosato se enmarca en Alemania dentro de una campaña del Ministerio de Medio Ambiente de lucha contra la extinción de los insectos y la protección de la biodiversidad. Sobre todo en cuanto a las abejas. El año pasado, la revista Proceedings publicó un estudio de la Universidad de Texas en Austin (Estados Unidos), que explicó como la exposición al herbicida altera la comunidad microbiana en el sistema digestivo de esta especie, haciéndola más vulnerable a las infecciones.

“Los herbicidas de amplio espectro como el glifosato eliminan no solo las llamadas malas hierbas, sino también plantas de las que dependen especies de insectos para su alimentación. Debe volver a haber más zumbidos”, dijo Svenja Schulze, la ministra alemana de Medio Ambiente.

El glifosato forma parte de la categoría de herbicidas de amplio espectro y es el más utilizado del mundo, siendo Argentina, Brasil y Estados Unidos sus mayores consumidores. El julio pasado, Austria se convirtió en el primer país en prohibir el herbicida que desde 2015 es considerado como “posiblemente cancerígeno para humanos” por el IARC, el grupo de investigación sobre cáncer de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Sobre esa línea y estudios críticos se sostienen los sectores más ligados a la defensa del medio ambiente. En cambio, según Bayer, su fabricante oficial tras haber comprado a Monsanto, faltan evidencias científicas que lo corroboren. Esos sí, la diferencia es que los estudios de los detractores del agroquímico son públicos y los de sus defensores son clasificados.

El uso de pesticidas como una de las principales causas de mortandad de los insectos es uno de los aspectos que desarrolla el paquete de medidas del gobierno alemán. El objetivo es “reducir sistemáticamente” a partir del 2020 el uso de productos que contengan glifosato en y “eliminar totalmente” luego. En el medio, se encuentra la fecha de caducidad prevista por la Unión Europea, donde la licencia del glifosato tiene validez hasta finales de 2022.

Entre las nuevas normas, además, se incluye una modificación del reparto de los subsidios agrícolas europeos, de manera que en el futuro habrá menos dinero disponible por hectárea y serán mejor retribuidos los cultivos sostenibles, una medida largamente exigida por el Partido Socialdemócrata (SPD), socio menor de la gran coalición de gobierno de Merkel.

El Gobierno de Alemania anunció que destinará 100 millones al año para la promoción de medidas de protección para los insectos dentro y fuera del territorio agrícola, así como también para investigación. Muchos municipios ya trabajan en la creación de áreas sembradas de flores que permitan, por ejemplo, la conectividad de los insectos polinizadores.

La empresa Monsanto comercializó inicialmente el polémico herbicida bajo el nombre de Roundup, convertido en la bestia negra de los grupos ecologistas. Bayer compró Monsanto el año pasado y se enfrenta a miles de demandas millonarias por supuestos efectos en la salud humana. Hoy, el herbicida es comercializado por todas las grandes empresas de la industria agroquímica.

Fuentes:

– Foro Ambiental

– El País