El nuevo estadio de Estudiantes de La Plata, un hito en materia de sustentabilidad para el país
Sistema de reutilización de agua, tratamiento de residuos y energías renovables son algunas de las innovaciones de una construcción única entre los estadios argentinos.
Tras más de 14 años, el Club Estudiantes de La Plata volvió a tener casa propia. La inauguración fue entre las calles 1 y 57, el espacio de su antigua residencia, en una emotiva presentación que incluyó una caravana de miles de hinchas, la presencia de viejas glorias, el actual plantel junto a juveniles, dirigentes y diversos shows. Sin embargo, hay un aspecto que no muchos saben: es el primer estadio ambientalista de la Argentina.
El denominado Estadio Uno: Jorge Luis Hirschi, recibió la certificación ambiental EDGE de construcción sustentable, otorgada por la Corporación Financiera Internacional (IFC) del Banco Mundial. “La construcción aborda aspectos como el consumo racional del agua, el uso eficiente de la energía y el uso de energías renovables. Del mismo modo escoge particularmente los materiales constructivos”, tal como explicó el Honorable Senado de la Provincia de Buenos Aires, que declaró de interés legislativo la iniciativa de Estudiantes de construir un “estadio ambientalmente sustentable”.
Desde el club, presidido por el ex jugador e ídolo pincharrata Juan Sebastián Verón, detallaron que se llevó adelante un acuerdo con la empresa Signify (Philips) para equipar el estadio completamente con luces LED, lo que ayudará a reducir en un 40 % el consumo de energía, y tener la pantalla LED más moderna del fútbol argentino, con una dimensión de 12 por 6 metros. Además, es el primer estadio cien por ciento digital en el país con la mejor conectividad 4G y Wi-Fi.
La nueva casa de Estudiantes, por otra parte, cuenta con un sistema de reutilización de agua de lluvia y de filtrado para el riego del campo de juego instalado, lo que permitirá que el consumo sea de casi la mitad. A esto se suma la colocación de calefones solares, para abastecer el agua caliente de la zona de los vestuarios, y que en los alrededores del complejo se construyeron espacios verdes y recreativos.
En cuanto a los residuos, las autoridades del club firmaron un convenio de cooperación con la Coordinación Ecológica Área Metropolitana Sociedad del Estado (CEAMSE) para incorporarse al programa GIRSU (Gestión Integral de Residuos Sólidos Urbanos), que brinda asistencia a los municipios, las comunas y asociaciones. En ese sentido, también se pusieron cestos para clasificar los desechos.
El flamante estadio, que no tendrá vallas ni alambrados para separar el campo de juego de las tribunas, cuenta con capacidad para 30.018 espectadores. Su costo total fue de u$s 45 millones: 25 millones se desembolsaron durante la gestión de Verón del año 2015, 5 millones de un préstamo del banco Itaú, mientras que los otros 20 millones provenientes de recursos genuinos producidos por la venta de jugadores.
Fuentes:
– Foro Ambiental
– Télam